Agradezcamos por lo que Fue!!!!

Acordé al los sabios de la Kabbalah debemos agradecer por todo. El ser agradecidos es una de las condiciones para estar en sintonía con la

Fuente /Fuerza de la Abundancia.

Debemos dar gracias por lo que tenemos. Cuando agradecemos así sea por “lo poco”, ante “Los Cielos” nos hacemos merecedores de recibir “lo mucho” y destapamos los conductos de “La Abundancia” (Shefa).

También, nos enseñan los maestros, que debemos agradecer por lo que queremos, porque eso que “deseamos” ya se nos fue otorgado por “Los Cielos”. Y cuando agradecemos aquello que deseamos para nuestro futuro, pero aún no tenemos físicamente, comenzamos a materializarlo  en este “Mundo de Acción”.

Y por último debemos dar gracias por lo que fue, sea bueno o no tan bueno. Acordé a la Kabbalah agradecer por las cosas del pasado, hayan salido acorde a nuestras expectativas o no, nos ayuda a recibir en el presente y en el futuro.

¿Porque? Cuando somos capaces de dar gracias por el pasado, expandimos nuestra vasija ya que estamos reconociendo y justificando las decisiones y las acciones “Del Creador” ya que todo está dentro de su “jurisdicción”. Cada detalle, cada momento, cada logro, cada tropiezo, cada dolor lo vivimos porque esa es Su Voluntad, eso estaba “destinado” a ser. Entonces, al dar gracias por ese trauma, ese dolor, esa pérdida, estamos activando y liberando las chispas divinas del lugar que las tenía contenidas y estas nos hacen acercarnos a nuestra “Fuente de Divinidad” más interna y abrimos el dique de los ríos de bendiciones, dejamos que la abundancia fluya desde “Lo Alto” a este mundo material.

Los dolores y sufrimientos que tuvimos en el pasado, incluso aquellos que aún nos duelen y nos perturban solamente de recordarlos, también son vasijas que El Creador nos dió para recibir La Luz y es nuestro trabajo rescatar las Chispas Divinas que estas tienen. Debemos pedir a los cielos por que nos de las vasijas, ya sea que nos trajeron felicidades o nos trajeron dolores, porque solo a través de las vasijas es que somos capaces de recibir La Luz.  Es como esperar ganarnos la lotería pero no comprar el boleto de lotería, o pedir que nos paguen un dinero a través de una transferencia bancaria pero no tenemos una cuenta en donde recibir la transferencia.

Agradezcamos entonces, por aquellas cosas que salieron como esperábamos, pero seamos capaces de agradecer por aquello que no salió acorde a nuestros planes, sino acorde a los planes que El Creador tiene para nosotros. Abandonemos el deseo de querer controlar todo lo que pasa en nuestras vidas, dejemos de jugar a créenos D-os,  y asumamos nuestro rol de Co-Creador. Pidamos no solo por La Luz, pidamos también por las vasijas que nos van a ayudar a recibir La Luz.